Uno de cada cuatro trabajadores de Argentina afirma estar sufriendo o haber sufrido acoso laboral. Los datos surgen de un estudio regional del portal de empleos Bumeran del que participaron 5.300 personas, 1.500 de ellas en la Argentina y el resto en Chile, Ecuador, Panamá y Perú. De la investigación también surge que el porcentaje de Argentina es el mayor de la región.

El estudio señaló que el mobbing, o acoso laboral, “suele provocarle serios trastornos psicológicos”. En la Argentina, el 25% de las personas encuestadas dijo haberlo sufrido mientras que el 75% afirmó no haber sido víctima de este hostigamiento. Esto significa que, según lo recabado por las encuestas, 1 de cada 4 trabajadores de Argentina, fueron o son acosados en el ámbito laboral.

Las cifras crecen aún más cuando la pregunta apunta a saber si los encuestados fueron testigos de alguna situación de ese estilo. En ese caso, el 39% respondió que sí y el 61% que no. En el mismo estudio explican que “esta diferencia puede deberse a que es más fácil, y menos doloroso, reconocer el acoso laboral cuando otros son los protagonistas”.

Los trabajadores de Argentina son los más afectadas por el acoso laboral en la región. De los demás países que participaron en el estudio surgió que ninguno supero el 25% argentino. En Chile el 20% admitieron sufrir este tipo de acoso, en Ecuador el 17% y en Panamá y Perú el 11%.

Home office: ¿sí o no?

Por otra parte, del relevamiento surge que el 82% de los argentinos consultados prefiere ir al lugar de trabajo antes que trabajar desde su hogar. En ese mismo sentido, el 85% afirmó disfrutar la convivencia con otras personas en el trabajo. Mientras que al 14% solo lo prefiere “a veces” y solo el 1% prefiere no compartir con otras personas ese momento.

En cuanto a cómo es la convivencia con los compañeros de trabajo, el 48% afirmó que es buena y para el 41% es excelente. Mientras que solo para un 8% de los consultados es regular y para un 3% la calificó de forma negativa, incluyendo un 2% que la calificó como “mala” y el 1% que cree que es “horrible”